lunes, 30 de junio de 2014

Paz

Creo que uno de los regalos más lindo que me dejó la muerte de mi abuelita, fue que me terminó dejando una paz, es algo raro pero siento satisfacción y alegría de que ella está descansando.

Es algo raro muy raro, no tengo explicación ni teórica, ni de experiencias, no hay libros que me enseñe la muerte ... Pero solo siento paz, mucha paz creo que puedo seguir con la vida, ya no tengo  pena por que creo que ella no le gustaría verme triste. Siento que ahora debo luchar por su recuerdo, dicen por ahí que la persona muere cuando uno se olvida, ahí su recuerdo muere.

Su chalequito me transporta a ella por las noches, se que ella ve de algún lado del universo tal vez ella sabe mi pena y lo que la extraño, pero sé y confirmé en algún momento de la noche que ella está bien, por la pura sensación de mi corazón.

 Le di mucho amor así que voy a caminar por el sendero de la vida, se supone que ahora es una estrella; suelo pensarlo así es una estrella que ilumina mi oscuridad y yo la viajera de la vida, esa estrella me cuida.

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