La travesti

Entonces mientras caminaba por el centro de santiago, caminaba incansablemente por que tenía que ir a observar prostitutas en relación a una obra de teatro y se me ocurrió un cuento, acá va:

Eran las 20:00 mientras camino al lado de un obrero y una chica le dice "Buenas noches, papito", yo miro a mi alrededor y una calle llena de mujeres con short, tacones, escotes; nunca en mi vida había observado tan fijamente una calle con tanto detenimiento. Risas y más risas entre esas mujeres, pero había una que le decían Paola y yo la quedé mirando fijamente por atrás era la que estaba con sostén y una falda, entonces miré su cintura y sus piernas que no eran tan suaves, ni tenían un relieve de mujer. Me quedé pegada fumándome el cigarro hasta que Paola se dio vuelta y me supuse sus rasgos de su cara eran muy toscos como forzados a ser una mujer. Entonces Paola con su gracia invitaba a los hombres a pasar un ratito de amor por una cantidad de dinero, su gracia era interesante ya que si bien se esforzaba por ser una mujer tenía ese encanto de mujer sensual.

Me acerqué a ella si me podía prestar fuego que mi encendedor se había hechado a perder, me miraba con risa tal vez por pedírselo, me dijo obvio mija toma, le dije te pasaste! Me quedé observándola como se reía y meneaba las caderas a los hombres que a esa hora se acercaban tímidamente en la oscuridad. Un hombre se acerca a Paola y le dice cuánto das y ella se le acerca al oído, entonces no entendí; de

repente veo que a Paola le brillan los ojos tal el ofrecimiento del hombre. Pero ese brillo no era de alegría creo que sentí en algún momento que el brillo era de pena, de la rutina, de tocar a un hombre sin amor, de cumplir un trabajo por necesidad, de mover las caderas y desnudarse a un imbécil que nadie sabe.

Creo que esos ojos que brillaban eran de pena y de dolor, como que decían ayúdame y se alejó para perderse de mi vista.

Paola a pesar de cubrirse con esa ropa de mujer, en algún momento sentí que ella era mujer de verdad, ella solo le faltaba algo y pensé le falta amor.

Creadora: Ivonne Cavieres