domingo, 3 de enero de 2010

manitos de bebés


El año pasado me acuerdo que fuí hacer un voluntariado a un hogar que se llamaba Santa Bernardita. Cuando llegué me acuerdo haberte visto mi niño pequeño y haber tocado tus manitos desde el primer minuto que te ví sentí que eras mío, a pesar de las distancias que tenemos me dió la sensación de que te conocía hace mucho tiempo. Con un abrazo grande te tomé y te mecí, jugamos y yo te besé en tu carita tan pequeñita, el mundo era de los dos y nadie podía caer en mis brazos más que tú pequeño bebé.
Compartíamos tardes enteras jugando en tu pequeña pieza llena de juguetes y cantandote canciones para que pudieras estar más contento y también que no te quedarás dormido antes del almuerzo. Eramos muy felices juntos y tenía mucho miedo que un día llegarán tus nuevos papás y que después tu cariño me lo quitaran ya que proximamente me habian mostrado a claudio un bebé igual como tú que también había sido abandonado. Tenía mucha rabia al saber que me tenía que ir a mi casa sin ti y no podía llevarte, yo también quería sacarte a una plaza a jugar contigo y estar toda la tarde y toda mi vida al lado tuyo.
Eres mi niño más lindo y precioso tal vez no seré tu madre bilógica pero en el minuto en que te ví sentí que en un abrir y cerrar de ojos te di a luz y no quería despegarme de ti. Fuiste parte de mi vida y llegaste a mi corazón para quedarte por siempre, por que al saber tu historia no es fácil vivir a tus cortos 1 año y medio.
te quiero más que nada en este mundo y deseo lo mejor para tí tal vez ahora estás lejos de mí con tus papás nuevos, espero que te cuiden tal como lo hice yo y que te amen como siempre hice lo mejor posible, tal vez nunca leas este blog tampoco quisiera que lo leyeras por que no quiero que recuerdes el pasado, me alegra que vivas un futuro felíz con tus padres nuevos y que seas un niño tan felíz como yo también lo fuí y de aquí ahora nunca más vuelvas a un hogar ni siquiera a repetir una historia tan triste y sola. Siempre pensé que tu eras para mi un avión que te gustaba volar y volar además siempre en mis brazos te gustaba hacer eso, creo que eso quiero que seas un avión que ahora tu tendrás que elevarte de apoco para alcanzar el cielo.
Si alguna vez lloras siempre estaré meciendote y dandote tu mamadera para que se te quite por que lo que más triste me hacía era verte llorar. Sí ríes yo me pondré contenta y haré que cada día el sol brille solamente para ti y si te sientes cansado te doy mis brazos que siempre estarán abiertos.
Mi pequeño Benjamín y Javiera y a todos los bebés del hogar santa bernardita que Dios los acompañé en el gran camino de la vida por que lo que yo más quiero es que puedan tener una familia y que sean unos niños muy felices.

No hay comentarios:

Publicar un comentario