jueves, 31 de diciembre de 2009

El principe que no llego a besarte......

Hace algún tiempo leí amor en tiempos de cóleras y lo que más me gustó de ese libro fue como el hombre es capaz a través del amor de poder idealizar a una persona y amarla, a pesar de los años que puedan pasar. No obstante al enfrentarse al amor de vuelta y volver a reencontrarse uno con la persona amada puede destruirse esa magia y esto es por que uno se idealiza a esa persona y se aferra a un recuerdo que muchas veces causamos en errar.
No obstante el recuerdo de esa persona amada es algo que va más allá de un simple recuerdo, uno fantasea y hace actos de locura por mantener viva el recuerdo de esa persona; el cuerpo ya no siente si no que es tu corazón y el impulso de los sentidos los que vivan a tu cuerpo una respuesta que a lo mejor pueden pasar meses o años, pero el esperar no solo aumentará la angustia sino que va cerrandote lentamente en una fantasía confusa e irracional. No sólo puede o no que vuleva pero el regreso puede traerte sorpresa como también lamentos y confusiones.
Creo que cada uno en su corazón espera ese principe o princesa de ensueños y que se construye además de planificarse estar toda la vida con él y vivir felices. Pero creo y rescato algo maravilloso que tiene el ser humano en toda estas situaciones que es la capacidad que tiene de poder luchar por un sueño y aumentar las pasiones por el deseo constante de desear alguien fervientemente.
En mi caso yo también tengo una obseción paranoíca con un hombre.... algunas veces es inconsciente pero creo entender a una mujer cuando el amor es mucho más que la misma piel y esto se debe a que la sangre te llama a buscarlo. Tu pieza se llena a su perfume y empiezas a soñar y a pensar en dónde puede estar, y que fue lo que hice mal. Su cuerpo ya no es un sólo objeto es un lugar en donde constantemente tendrás fantasías y gozaras de bellos pensamientos poéticos hacia él. Muchas veces un orgasmo deja de ser una satisfacción placentera y pasa hacer un suspiro al hombre que añoras y que esperas en tu imaginación.
El hombre se hizo para amar y dejarse amar, pero es capaz de perder el sentido común y es que el amor es mucho más que el mismo acto o sólo un beso; es algo que todavía es un misterio hasta para mí.